Estaba claro que a los cassetes no les quedaba demasiado tiempo de vida, era algo evidente, pero leerlo así, con una fecha de exterminio determinada parece que me ha impresionado. 18 meses les dan de vida. Ya casi nadie mira para ellos, ni siquiera piensa en ellos (sólo los que todavía tenemos cassete en el coche). Tengo amigos que nunca los utilizaron. Pero, ¡tantos años de mi vida están grabados en esos pequeños artilugios! que he de admitir que me da pena, me da mucha pena.
No puedo calcular las horas que pasé delante del cassete grabando una cinta para alguien. Era como un reto personal. Nadie podía tener una cinta igual, cada persona, por como es, merece una u otra cinta. Dependía de la época, dependía de lo que significara para tí, dependía de lo que quisieras demostrar, de lo que quisieras decir o de lo que quisieras que intuyera. Era todo un arte que te podía llevar horas e incluso días. Queda perfectamente reflejado en la película Alta fidelidad, dónde me veo totalmente representada por John Cusack.
Alguno dirá que se puede hacer igual ahora con los cds, pues no. Ahora no son tan personalizados, ahora no tienes que escuchar todo mientras lo grabas (lo que antaño hacía que muchas veces te arrepintieras), ahora es el aparatito el que calcula lo que duran las canciones y si te entran o no te entran, no es lo mismo, no señor.
No puedo calcular las horas que pasé delante del cassete grabando una cinta para alguien. Era como un reto personal. Nadie podía tener una cinta igual, cada persona, por como es, merece una u otra cinta. Dependía de la época, dependía de lo que significara para tí, dependía de lo que quisieras demostrar, de lo que quisieras decir o de lo que quisieras que intuyera. Era todo un arte que te podía llevar horas e incluso días. Queda perfectamente reflejado en la película Alta fidelidad, dónde me veo totalmente representada por John Cusack.
Alguno dirá que se puede hacer igual ahora con los cds, pues no. Ahora no son tan personalizados, ahora no tienes que escuchar todo mientras lo grabas (lo que antaño hacía que muchas veces te arrepintieras), ahora es el aparatito el que calcula lo que duran las canciones y si te entran o no te entran, no es lo mismo, no señor.
7 comentarios:
Hay, cariño, que razón tienes!!!
Me acuerdo perfectamente, y es que uno se lo curraba mucho, y sí, grabar una cinta era especial, porque te llevaba un tiempo especial para alguien en especial:(
Y eso de que "las cintas no se llevan", como dijo el amigo de Diego (el de San Roman), es mentira!!!
Un hurra por las cintas!!! yeah!!!
No soy anónimo!!! Que soy Lore!!! jajajajajaja.
jajajajajaj es verdad, por lo menos en mi coche, se llevan, y por muchos años!
¡Cuánta razón tienes!
Me pasé mi adolescencia grabando cintas de "varios", tanto para mí como para gente "especial".
De todas formas soy un auténtico fan del cd y cuando me pude pillar una grabadora me pasé por completo a grabar cd's. La posibilidad de escuchar cada canción sin tener que adelantar o rebobinar, fue algo que salvo mis neuronas.
Por cierto, qué grande es John Cusack y que película más buena. Fundamental para cualquier friki de la música. El personaje de Tim Robbins es tán detestable...
jajajaja ya. Sí que se le coge asquillo al bueno de Tim sí.
Hola Rb,pues con los avances tecnológicos, me da que al cd le quedan pocos telediarios tambien.Le auguro menos existencia que al k7...Creo que el vinilo terminará vencedor absoluto en esta guerra de formatos.
Tampoco soy anónima, que soy carmen desde Oviedo.Un beso!
jajajajaja Tienes razón Carmen, el vinilo al podio! Esto avanza demasiado rápido, sabe dios dentro de cuanto leeremos esto y tendremos que pensar cómo eran aquellos aparatejos de los que hablamos aquí.
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